Puente Trift (Triftbrucke) y Glaciar Trift (Trift Glacier)
Este post forma parte de Nuestra Ruta por Suiza
Tras visitar ayer las cascadas de Lauterbrunnen y el monte Schilthorn, hoy tenemos una nueva excursión donde podremos cruzar uno de los puentes colgantes más largos de los Alpes con sus 170 metros de longitud: el puente Trift (Triftbrucke en alemán). Además, también tendremos la oportunidad de ver uno de los pocos glaciares que tenemos en Europa: el Glaciar Trift (o Triftglacier). Antiguamente, el glaciar llegaba hasta el lago permitiendo el paso hasta el refugio; sin embargo, con el retroceso del glaciar, se tuvo que tender el puente para asegurar el paso.
Para iniciar la excursión debemos coger el teleférico de Triftbrücke desde la estación de Inntertkirchen que veremos indicada como Triftbahn. Se trata de una pequeña estación justo en la curva de la carretera y, a mano izquierda, encontraremos el aparcamiento donde podemos dejar el coche.
En unos 10 minutos, el teleférico alcanza los 1.390 m de la estación superior pasando por un bosque de abetos y por una garganta que nos deja unas vistas increíbles. Una vez arriba, hay que descender unos 200 escalones para acceder al camino que, a partir de ahí, será en ascenso: una fuerte subida inicial seguida de un ascenso más gradual nos llevará hasta un punto en el que el camino se bifurca. Debemos escoger el lado izquierdo ya que es la opción más rápida para llegar al puente y, si finalmente nos decidimos por ir hasta el refugio de Windegghütte, podemos bajar por el otro lado haciendo así una ruta circular hasta este punto.
A 1.690 m de altitud nos encontramos el puente que está a 100 m por encima del agua. Desde ahí tenemos unas vistas impresionantes del glaciar Trift aunque es demoledor pensar lo mucho que se ha reducido en los últimos años ya que antes la lengua del glaciar llegaba a donde hoy vemos un lago bajo el puente. Podemos cruzar los 170 m de longitud del puente que vibra a cada paso haciendo que la experiencia sea auténtica...
Decidimos que estas impresionantes vistas bien merecían pararnos a verlas durante un buen rato. Así que creímos que era el momento y lugar indicado para reponer fuerzas y tomar un tentenpié.
Una vez bien admirado el paisaje y con las pilas recargadas, vimos que teníamos tres opciones:
- Deshacer el camino andado y volver al teleférico para bajar. Esto nos llevaría aproximadamente una hora ya que es todo bajada excepto las escaleras del final.
- Cruzar el puente y continuar hasta el refugio Trift a 2.521 m de altitud. Para esta opción deberíamos preveer unas 3 h más de recorrido.
- Ir a la derecha para llegar hasta el refugio de Windegghütte a 1.880 m. Debemos calcular otros 40 minutos para llegar.
Finalmente, nos decantamos por la última opción y fuimos hasta el refugio de Windegghütte. Hay que tener en cuenta que la subida es bastante pronunciada y de hecho hay tramos en los que debemos ir cogidos a cadenas. De todas formas, vimos a niños haciendo el camino por lo que es accesible para todos siempre y cuando cada uno lleve su ritmo. En base a nuestra experiencia, lo recomendamos porque fue divertido y las vistas merecen realmente la pena.
Una vez en el refugio podemos disfrutar de un merecido descanso y aprovechamos para comer en un lugar con mucho encanto.
Tras comer y disfrutar de las vistas y de este entorno sin igual, sólo nos queda volver al teleférico e ir de vuelta al coche. Nuestro plan era finalizar el día visitando la pequeña ciudad de Brienz antes de volver a Interlaken.
Horarios y precios del teleférico del Trift
Se pueden comprar las entradas con antelación a través de la página web: https://besucherdienst.kwo.ch/grimselwelt/?rq_Layout=GribookMob&rq_Start=5374617274#{2} y en temporada alta es recomendable hacerlo ya que las cabinas del teleférico son muy pequeñas y únicamente caben 8 personas en cada viaje.
Horario: 8 – 17 h
Precio: 24 CHF por adulto y 10 CHF por niño. (Precios de 2018)
Una curiosidad del Trift
La compañía que gestiona el teleférico se llama KWO y aprovecha la energía del agua para generar electricidad. Inicialmente se construyó como medio para transportar la carga pero a día de hoy, es en realidad el medio de acceso al puente para los muchos visitantes que acuden cada día.